viernes, 27 de junio de 2008

LAS CLASES DE MASAJE TERAPÉUTICO




Como es comprensible, no se puede abarcar un universo tan amplio y complejo como es el masaje terapéutico sobre la base de unas horas de clase. Pero, si los lectores lo aceptan, voy a describir, brevemente, mis descubrimientos más generales.
Por ejemplo eso mismo: el hecho que la masoterapia es un “universo tan amplio y complejo”. Cada movimiento tiene su función, cada función está en relación con un punto del cuerpo (análogamente a la acupuntura), cada punto del cuerpo puede ser contactado, además de la acción manual, desde la correlación entre el ‘chi’ (la energía) del paciente y el ‘chi’ del terapeuta, y eso tiene consecuencias en la eficacia del masaje.


Como saben quienes practican esta disciplina (la masoterapia), la precisión de cada movimiento está vinculada a los meridianos, y la dirección del movimiento es crucial para el efecto que se quiere lograr (por ejemplo, a favor de la dirección de las agujas del reloj -un reloj de cuadrante analógico, claro- o en contra de esa dirección). No me parece prudente hablar de ‘simbolismo’ aquí, pero sí me parece importante mencionar la diferencia con el masaje de un kinesiólogo ‘occidental’, por bueno que éste sea. En el masaje de la kinesiología occidental uno puede permanecer ‘indiferente’, me refiero a la actitud mental durante la kinesiterapia. Sería como la diferencia entre ‘entregar el brazo’ al kinesiólogo y 'entregarse' al masaje del masoterapista.
En la masoterapia (si no he comprendido mal al Dr. Peng Xuming), es crucial la interconexión entre paciente y terapeuta por la vía de la energía ‘chi’ relacionada con el punto de dolor o enfermedad. El que bien podría denominarse genéricamente des-armonía. El paciente debe concentrarse en el punto preciso de su molestia ‘durante’ la masoterapia.
Entre las informaciones que fueron sorprendentes, para quienes éramos meros observadores de la masoterapia y no terapistas, está una que me es útil aquí para volver sobre la idea de ‘integración’. Porque los estudiantes universitarios de masoterapia tienen, como materias (ramos) obligadas, artes marciales (fuente: Dr. Peng Xuming). El Dr. Peng señaló que la masoterapia comenzó, en verdad, en las escuelas de Kung Fu, para mejorar los estados de los practicantes de esa disciplina. En verdad, entonces, la masoterapia se inició en el Templo Shaolín, cuna del Kung Fú [ver imágenes más adelante en sección 8.]. Las clases del Dr. Peng fueron fructíferas, claras y detalladas. Cada uno de nosotros logró poner en práctica sus enseñanzas, con un compañero. Su competencia en el tema sustentaba cada explicación profunda acerca del sentido de los movimientos del terapista en relación con el malestar y con los puntos significativos del cuerpo (como meridianos, etc.).

sábado, 21 de junio de 2008

LA CLASE SOBRE PINTURA CHINA




A mi parecer, esa clase estuvo organizada del modo más apropiado para nosotros como visitantes. Porque nos permitió asistir al nacimiento y desarrollo del proceso completo de una pintura sobre papel vertical.

El artista, allí presente, Maestro Yu Zhi, uno de los fundadores de la Asociación de Choy Lee Fut de Xin Hui, pintaba casi como si estuviera realizando una ‘forma’ (me refiero a una 'forma' de ‘artes marciales’), casi sin dudar. La rapidez en la realización fue explicada por él a partir de la idea que la pintura se comienza en la mente, se trabaja antes mentalmente. De manera que cuando va al papel, ya está concebida.

La caligrafía se considera como pintura china, pintura ‘nacional’. Para producirla se necesita papel, tinta y pinceles variados en grosor y tipo de pelo. La caligrafía, explicó el maestro Zhi, “tiene que lograr soltura, llegar a expresar alegría, es algo muy profundo. Por eso las traducciones de una caligrafía sólo traducen las líneas generales. Hacer caligrafía es algo similar a hacer Kung Fú o Qi Gong:
“Hay que concentrar el ‘chi’ antes de pintar. No haces una caligrafía saliéndote de ti mismo, porque la pintura así no resulta, hay que concentrarse en sí mismo. Pero a la vez ser decidido, cuando sales hacia fuera con el pincel, no tímido." (texto a partir de lo expuesto por el traductor del artista, desde el inglés).


Tal vez sea lícito añadir que, en algunas pinturas, las formas ‘canónicas’ permiten establecer sobre el papel o la tela algo así como ‘palabras-visuales’, por ejemplo, unas rocas, un pino con las características de los pinos de la Montaña Amarilla, las nubes entre medio de dos grupos rocosos...

La primera parte de la demostración-creación, fue crear un paisaje de montaña. Días después notamos, al caminar por los senderos de piedra de la Montaña Amarilla, la montaña más sagrada para los chinos, que la imagen de la clase de pintura en Xin Hui, respetaba los múltiples paisajes, similares y diversos a la vez, fáciles de observar en esa montaña. Eran rocas a diversas alturas, una precisa variedad de pino, y las nubes entre medio, el famoso ‘mar de nubes’ de que se habla en todos lados. Mar de nubes, y no cielo con nubes, porque ves las nubes desde arriba, extenderse como el agua del océano. La experiencia más parecida es ver las nubes allá, abajo, desde la ventanilla de un avión.

Nuestro guía, el notable John, insistía con una pregunta que no lográbamos responder:
¿Saben Uds. cuál es el maestro más importante de la pintura china? Nuestro silencio lo llevó a aclararlo: - Es la Montaña Amarilla. Ella enseña a pintar con excelencia a quienes saben contemplarla.

Poco a poco el artista pintor fue completando la imagen, y la obra fue colgada a un lado en espera de que secara la primera parte. Posteriormente el maestro, en un breve rato más, concluyó su obra, puesto que el papel usado era muy absorbente, el artista Yu Zhi puso suaves toques de color, escribió algo con delicada caligrafía y apretó, finalmente, su sello en la parte superior derecha de la pintura.

viernes, 13 de junio de 2008

LA CLASE DE KUNG FU CHÁ







La información programada acerca del gran tema del Té (Chá) en China fue iniciada por el Dr. Peng, experto en masaje terapéutico y jefe del servicio de masoterapia en uno de los Hospitales de Xin Hui. Fue continuada por un experto en té, junto con la gerente y dueña una de las casas de té más importantes de Xin Hui.



Tomo aquello como indicio sencillo y elocuente de que los territorios de actividades, acciones, competencias se integran en lugar de estar separados en compartimentos estancos cultivados exclusivamente por especialistas. Me refiero a algo que dijo Dr. Peng: en la Universidad, el estudiante de Masaje terapéutico tiene cursos obligatorios de Artes Marciales (Kung Fú y Tai Chi). Porque le serán útiles en su futura labor de terapista.

¿Por qué “Kung Fú Cha”? En uno de los tantos sitios de Internet donde se describe el proceso, se aclara que ese término ‘Kung Fu’ no se aplica exclusivamente a las artes marciales, sino que tiene más significados: tarea dura, nivel de logro, competencia, entre otros.
No es del caso describir cada uno de los doce pasos que nos fueron mostrados en la clase de Kung Fú Chá. El segundo de los cuales es: “mirar el té”, observarlo, contemplarlo.

Esto nos habla de otros ritmos, cierto. Sin embargo ¿damos una porción de tiempo para esos ritmos en nuestras vidas, aun en los días en que podríamos disponer de tiempo para hacerlo? Quiero decir que en muchos casos es asunto de ‘actitud’ ante la realidad.

En cada uno de esos pasos hay algo en lo cual detenerse, aun en los pocillos cilíndricos, pongo por ejemplo, una vez que se ha vaciado el té en los pequeños posillos ‘semi-esféricos’. Porque, hay algo que queda después, en los pocillos cilíndricos vacíos: es el aroma de lo que allí estuvo, y que puede brindar un momento de goce y serenidad.

Otro detalle interesante. La diferencia de recipientes (vasos transparentes o diminutos pocillos semi-esféricos) depende del tipo de té. Por ejemplo, el llamado ‘arte floral’, exige un vaso alto y transparente. Cada una de las esferas de té de ‘arte floral’ (hechas una a una a mano) contiene una flor natural que se va abriendo lentamente desde el fondo del vaso mientras el té llega a su punto para beberlo. Nuestra ‘tarea’ es contemplar cómo esa flor se va liberando de su entorno de hojas de té y luce dentro del vaso -transparente-, antes de beberlo.



A los navegadores curiosos les sugiero visitar en Internet, entre otros, especialmente : http://chineseteas101.com/kungfu_1.ht
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viernes, 6 de junio de 2008

5. ACTIVIDADES INTEGRADAS (MASAJE TERAPÉUTICO, KUNG FU CHÁ, PINTURA)

Siguiendo una ‘filosofía cultural’, si se la puede denominar así, en paralelo con los seminarios de artes marciales, asistimos a clases sobre tres disciplinas diferentes: la ceremonia china del té (Kung Fu Chá), la realización de una pintura en tintas y (principios de) masaje terapéutico (masoterapia). Cada uno de esos maestros, los que fueron nuestros maestros esos días, tiene su especialidad, la que practica enfáticamente, pero a la vez posee conocimiento y/o práctica de otras disciplinas. No olvidemos, por ejemplo, que la caligrafía es un arte visual, a la par de un medio de comunicación. Y que la pintura es un arte visual y a la vez un medio de comunicación simbólica.

Sobre este punto, el simbolismo, quisiera dejar una idea abierta: la fuerte ‘polisemia’ de esa cultura (me refiero a la multitud significativa que habitualmente presentan
los fenómenos, algo que también podría denominarse ‘simbolismo ecuménico’, extendido, general).

Ante las explicaciones de uno de nuestros guías, el Sr. John, parecía como si cada cosa simbolizara otra. Donde nosotros podíamos ver unos objetos colocados sin más sobre un mueble (por ejemplo en la Villa Hong –ver más adelante-), la explicación del guía nos indicaba lo siguiente: el espejo simboliza tranquilidad, el sonido del reloj, vida eterna, el jarrón de porcelana decorado con flores, la paz.




Otro ejemplo, un pino, por ejemplo, con una forma peculiar (en la Montaña Amarilla) lleva por nombre “tigre negro”, allí mismo las rocas tienen sus nombres de acuerdo con la forma aparente (cosa que conocemos asimismo en nuestra cultura Latinoamericana).

Pero, si nos situamos en el ejemplo de la villa Hong (que data de la dinastía Ming [1368-1644], donde se filmó la famosa película “El tigre y el dragón” ), en las viviendas, la zona de los mayores se construía más elevada para indicar, simbolizar así, precisamente el respeto hacia los mayores de la familia.

A la vez, en época de emperadores, los metros cuadrados de una vivienda, estaban regulados de acuerdo con la jerarquía de sus habitantes. Otro tanto respecto de los colores a los que se tenía derecho al pintar las paredes (colores para los emperadores, diferentes a los de los comerciantes y campesinos). Podríamos decir que en estos casos no estamos ante símbolos, sino ante signos y que fueron elaborados como parte de las acciones para exhibir el poder jerárquico y poder controlar. Nuestra cultura los tiene también, y forman nuestro universo connotativo socio-cultural, tal vez la regulación es, entre nosotros, más subrepticia y oculta.

En la ceremonia del té, el poner el té en el pote cerámico se nombra como “el dragón entra en su palacio”; el reparto del té en los pequeños pocillos cilíndricos, se nombra como “ el general escoge sus soldados”.




Asimismo, los movimientos que corresponden a las ‘formas’ en las artes marciales, son miméticos (¿simbólicos?), respecto de movimientos de los animales: en una forma de Qi Gong, de un punto a otro, por ejemplo, se arrastra el pie en analogía con el desplazamiento de la serpiente; o una apertura de brazos, como destaca el Sifu Raúl Toutin en sus clases en Santiago de Chile, corresponde a: ‘la cigüeña abre sus alas’.

Como se nota, existe una compleja trama de simbolismos algunos de los cuales están vinculados con nociones espirituales (el reloj, equivalente a vida eterna), otros a situaciones socio-económicas (los metros cuadrados regulados de las viviendas), otros, aun, a la espiritualización de una acción cotidiana o semi-cotidiana (la ceremonia del té).